Desde nuestro viaje a Roma encontré un nuevo placer en conocer y probar la comida típica de cada país. Y Polonia destaca precisamente por su gastronomía. En esta entrada pretendo hablar un poco sobre los platos que probamos en Cracovia y recomendaré los mejores sitios en los que comimos durante nuestra estancia.
COMIDA TÍPICA
2. PIEROGI
Los pierogies son lo más típico de la comida polaca. Son una especie de empanadillas pero hervidas, más bien parecidos a los raviolis. También se pueden encontrar fritos. Yo pensaba que no me iban a gustar y sin embargo me encantaron. Los tradicionales son los pierogi ruskie (rellenos de patata y queso), pero se pueden encontrar de todo tipo, incluso dulces. Este plato lo sirven en cualquier lugar, y todos están riquísimos, pero yo recomiendo especialmente probarlos en Pierogarnia, pues es un sitio especializado en pierogies de todo tipo.
3. GOLONKA
El golonka o codillo es un plato también muy típico de Polonia. A mí personalmente no me gusta mucho la carne, así que lo disfruté menos. A Dani, en cambio, fue uno de los platos que más le gustó. Estaba muy blandito, la carne se deshacía en la boca. Este lo probamos en Chlopskie Jadlo, pero este lugar no lo recomendaría especialmente porque los precios eran un poco más caros que en otros sitios. Sin embargo, probamos otros codillos en otros dos sitios y de todos este fue el que más nos gustó.
4. BARSZCZ
Es una sopa de remolacha. Se puede servir con raviolis, huevo... Nosotros lo probamos también en "Casa de la abuela" y lo pedimos con raviolis ("Barszcz z uszkami"). Era un sabor curioso, también muy fuerte. Nos gustó menos que la zurek y no lo volvimos a pedir, pero creo que es otra de las cosas que merece la pena probar.
5. ZAPIEKANKA
El zapiekanka es una especie de panini típico de Polonia. La base tradicional lleva queso y champiñones, y se le suele echar ketchup por encima. El lugar perfecto para probarlos es Plac Nowy (Plaza Nueva). Allí hay muchos puestos callejeros en los que los venden con diversos ingredientes. ¡A nosotros nos gustó tanto que fuimos dos noches seguidas! El único inconveniente es que no hay sitio para sentarse, por lo que hay que comerlos de pie, pero merece totalmente la pena.
6. GOULASH
El plato de la izquierda, es una
especia de estofado de carne. No es lo que más nos sorprendió, pero
estaba bastante bueno y merece la pena probarlo. Este lo probamos en Pod
Temida, un bar de leche que terminó siendo nuestro favorito. En la foto
también aparece una sopa de tomate, zupa pomidoroza, que nos encantó.
Aprovecho para añadir que otro plato muy típico de Polonia es el bigos, con una base de col y una mezcla de carnes. Este no nos gustó nada, he hecho, se nos olvidó hasta hacerle foto.
7. OSCYPEK
El oscypek es un queso de oveja ahumado que se sirve calentito y con mermelada. En Cracovia no lo vimos, por lo visto es típico de los montes Tatras. Nosotros lo probamos el día que estuvimos en Zakopane, un pequeño pueblo de las montañas. Allí lo vendían de dos formas: frío para llevar a casa, o caliente para tomarlo en el momento. El primero lo compramos en un carrito como el de la foto, estaba frío y era como morder un cigarro, sabía totalmente a humo. El segundo en cambio lo compramos en sitio llamado Placki Ziemniaczane (en calle Krupowki) y estaba bastante mejor. Lo acompañamos de un vino caliente, también muy típico de Polonia, y ese sí lo disfrutamos.
8. DULCES
En cuanto a postres y dulces la verdad es que probamos pocos. Los rollitos de la foto se llaman kürtoskalács, y realmente dulces típicos húngaros. Pero en Cracovia vimos un puesto ambulante en el que los vendían y nos apeteció probarlos. Pedimos uno de canela y otro de vainilla, y estaban riquísimos a pesar de ser un dulce aparentemente bastante simple.
Un dulce que sí es típico de Polonia es el pączek (pączki en plural). Es una especie de donut sin agujero, con diferentes rellenos. El más tradicional es el relleno de mermelada de rosa. Nos sorprendió bastante.
4. BARSZCZ
5. ZAPIEKANKA
6. GOULASH
Aprovecho para añadir que otro plato muy típico de Polonia es el bigos, con una base de col y una mezcla de carnes. Este no nos gustó nada, he hecho, se nos olvidó hasta hacerle foto.
7. OSCYPEK
8. DULCES
Un dulce que sí es típico de Polonia es el pączek (pączki en plural). Es una especie de donut sin agujero, con diferentes rellenos. El más tradicional es el relleno de mermelada de rosa. Nos sorprendió bastante.
9. BEBIDAS
En Cracovia probamos varias bebidas diferentes y curiosas. La primera curiosidad es que allí sirven cerveza con sirope (primera foto). Nosotros la pedimos con sirope de fresa en Pierogarnia y a mí no me gustó demasiado, me recordaba al sabor del apiretal. Otra bebida típica es el kompot, realizado a base de frutas y con un color rojizo. Este sí me gustó y lo pedí en varias ocasiones más.
También, como ya comenté antes, es muy típico el vino y la cerveza caliente. El vino al principio no nos gustó demasiado, nos recordó a un té, pero le terminamos pillando el gusto.
Por último, si vais de fiesta tenéis que probar el soplica: vodka con distintos sabores. Lo hay de fresa, frambuesa, almendra, membrillo, higo, etc. Nos gustó tanto que compramos varias botellitas de 100ml en un supermecado para poder traerlas a España. Por cierto, el sitio que recomiendan para beber chupitos de vodka es Pijalnia, pero nosotros no llegamos a entrar porque cuando íbamos siempre había mucha gente. Nosotros lo probamos en un pub llamado Kochanka folk shotbar, en Plac Nowy, estuvimos bastante a gusto y los camereros fueron muy amables.
1. POD TEMIDA
Uno de los grandes descubrimientos que hicimos en Cracovia son los bares de leche. Tienen su origen en la Polonia socialista, cuando se abrieron bares cerca de las fábrica para que lso trabajadores pudieran comer a precios muy económicos. Y la tradición de los precios se sigue manteniendo. Son lugares en los que comer mucho y barato, además de poder probar las comidas más típicas. Lo único, es que no venden cerveza ni bebidas con alcohol. Además, no sirven en la mesa, sino que pasas por la barra con una bandeja, pides el plato que quieres y te lo dan en el momento.
Nuestro favorito fue Pod Temida. Está en la calle Grodzka, a 7 minutos de la Plaza del Mercado. Es muy barato, por unos 5 euros puedes pedir dos platos y postre. Además, algunos platos van acompañados de una ensalada aparte.
2. KUCHNIA STAROPOLSKA U BABCI MALINY
Este restaurante es conocido como "Casa de la abuela" y es fue uno de mis favoritos por su sopa zurek. Es uno de los mejores sitios para probar comida tradicional polaca (dejo un par de fotos de la carta, aunque la variedad era mucho mayor). Hay dos establecimientos en Cracovia, ambos muy cerca del centro. Nosotros probamos el de la calle Sławkowska, que estaba a cuatro minutos andando desde el hostal.
Cuesta un poco encontrar la entrada. Hay un cartel en la puerta pero cuando entras en el edificio te da la sensación de que te has equivocado, pues hay un largo pasillo que parece un museo. Al fondo del pasillo hay una puerta a la izquierda que da a un pequeño patio y ahí está la puerta del restaurante (hay que bajar unas escaleras).
Hay que tener en cuenta que no hay servicio a mesa, por lo que tienes que ir a la barra a pedir, te dan un número y hay una pantalla en la que te avisan cuando la comida está lista para recoger. Por cierto, ¡la decoración del restaurante es muy curiosa!
También, como ya comenté antes, es muy típico el vino y la cerveza caliente. El vino al principio no nos gustó demasiado, nos recordó a un té, pero le terminamos pillando el gusto.
Por último, si vais de fiesta tenéis que probar el soplica: vodka con distintos sabores. Lo hay de fresa, frambuesa, almendra, membrillo, higo, etc. Nos gustó tanto que compramos varias botellitas de 100ml en un supermecado para poder traerlas a España. Por cierto, el sitio que recomiendan para beber chupitos de vodka es Pijalnia, pero nosotros no llegamos a entrar porque cuando íbamos siempre había mucha gente. Nosotros lo probamos en un pub llamado Kochanka folk shotbar, en Plac Nowy, estuvimos bastante a gusto y los camereros fueron muy amables.
¿DÓNDE COMER? TOP 5
1. POD TEMIDA
Uno de los grandes descubrimientos que hicimos en Cracovia son los bares de leche. Tienen su origen en la Polonia socialista, cuando se abrieron bares cerca de las fábrica para que lso trabajadores pudieran comer a precios muy económicos. Y la tradición de los precios se sigue manteniendo. Son lugares en los que comer mucho y barato, además de poder probar las comidas más típicas. Lo único, es que no venden cerveza ni bebidas con alcohol. Además, no sirven en la mesa, sino que pasas por la barra con una bandeja, pides el plato que quieres y te lo dan en el momento.
Nuestro favorito fue Pod Temida. Está en la calle Grodzka, a 7 minutos de la Plaza del Mercado. Es muy barato, por unos 5 euros puedes pedir dos platos y postre. Además, algunos platos van acompañados de una ensalada aparte.
2. KUCHNIA STAROPOLSKA U BABCI MALINY
Este restaurante es conocido como "Casa de la abuela" y es fue uno de mis favoritos por su sopa zurek. Es uno de los mejores sitios para probar comida tradicional polaca (dejo un par de fotos de la carta, aunque la variedad era mucho mayor). Hay dos establecimientos en Cracovia, ambos muy cerca del centro. Nosotros probamos el de la calle Sławkowska, que estaba a cuatro minutos andando desde el hostal.
Cuesta un poco encontrar la entrada. Hay un cartel en la puerta pero cuando entras en el edificio te da la sensación de que te has equivocado, pues hay un largo pasillo que parece un museo. Al fondo del pasillo hay una puerta a la izquierda que da a un pequeño patio y ahí está la puerta del restaurante (hay que bajar unas escaleras).
Hay que tener en cuenta que no hay servicio a mesa, por lo que tienes que ir a la barra a pedir, te dan un número y hay una pantalla en la que te avisan cuando la comida está lista para recoger. Por cierto, ¡la decoración del restaurante es muy curiosa!
3. PIEROGARNIA KRAKOVIACY
Es el mejor lugar para probar los famosos pierogi, los hay de todo tipo, ¡incluso dulces! Además, hay sopas y algunas cosas más. Tampoco hay servicio a mesa, por lo que tienes que pedir y recoger la comida en barra. Las camareras llevan vestidos tradicionales y son muy amables. Al igual que el anterior, está en la calle Sławkowska, muy cerca del centro.
4. POD WAWELEM
Tengo una relación de amor-odio con este lugar. Era uno de los más recomendados de Cracovia, incluso el guía de un free tour nos habló de él. Sin embargo, a mí me decepcionó un poco, tal vez porque iba con demasiadas expectativas.
Este lugar es famoso por servir grandes porciones de comida. De hecho, al entrar al local hay un peso para que puedas comparar cuánto pesabas antes y después de comer, y en el baño de los chicos hay un vomitorio. Sin embargo, a nosotros los platos no nos parecieron especialmente grandes. Pero bueno, realmente la comida estaba buena y el restaurante está prácticamente al lado del castillo de Wawel, por lo que si estás por esa zona quizás merece la pena darle una oportunidad.
5. FITAGAIN CAFE
Este sitio lo recomiendo para desayunar. Para mí, el desayuno es la comida más importante del día y, sinceramente, la que más disfruto. El problema es que en Cracovia nos despertábamos todos los días a las 6:30 o 7:00 de la mañana para aprovechar el día al máximo, y a esa hora no encontrábamos nada abierto.Una mañana pasamos por casualidad por la puerta de este sitio y, al verlo abierto, entramos. El precio es mucho más alto de lo que se suele encontrar en Cracovia (nos gastamos más en desayunar que en almozar), pero mereció totalmente la pena, porque encima está al lado del hostal.
Aún se me hace la boca agua al ver las tortitas.
Esta entrada se me ha hecho muy larga, pero es que la comida fue uno de los aspectos que más disfruté en Cracovia. Recomiendo estos sitios porque fue en los que comimos, pero antes del viaje estuve buscando mucha información y apunté los lugares más recomendados para comer (aunque no pudimos probarlos todos). Pero si, aún después de leer esta entrada, te gustaría conocer más lugares donde comer, no dudes en contactarme.
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